Más información sobre el Daai Lohan
En esta forma la mente dirige la respiración y el movimiento. Se debe centrar la atención en los Dantian y en determinados puntos de los meridianos extraordinarios. La forma se practica con diferentes tipos de respiración y sonidos que ayudan a estimular zonas concretas y masajean los órganos internos. Se trabaja en dos posturas. Una serie de ejercicios se realizan sentado y otros tumbado. Utilizamos la posición de las palmas de las manos para dirigir el Qi en distintas direcciones, cambiando la orientación según el movimiento que se esté realizando. Las respiraciones son suaves y se emiten determinados sonidos, que masajean los Dantian al tiempo que se mantiene la atención en cada uno.
Estos ejercicios son especialmente recomendados para:
- Profesores y practicantes de Chi Kung, Yoga o cualquier otra disciplina corporal, que quieran llevar su práctica a un nivel más profundo.
- Personas con limitaciones de movilidad o que tengan dificultad para permanecer de pie.
- Profesionales de la salud que estén interesados en aplicar estos ejercicios para ayudar a sus pacientes.
- Terapeutas
- Cualquier persona que quiera adentrarse en el aspecto más meditativo del Chi Kung.
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